13 de septiembre: Un domingo complicado!

Si bien es cierto que cada día que pasa estoy más feliz con los resultados visibles de la dieta, lejos de estar más tranquila cada día que pasa me cuesta un poco más.
Soy constante, al menos lo vengo siendo desde hace un tiempo pero las tentaciones están a la orden del día y mi estómago engordado desde siempre me pide a gritos un poco de harina.
Definitivamente estoy sufriendo de abstinencia, sin ir más lejos, anoche por ejemplo soñé que festejábamos algún cumpleaños y yo, sentada al lado del cumpleañero sostenía la torta llena de crema que comenzaba a derretirse. Claro que no sólo la sostenía sino que además engullía toda la cobertura para que ésta no llegue a tocar el piso.
Me desperté asqueada, es cierto, pero con la felicidad de haber podido comer cuánto haya querido sin tener que limitarme a lo que Sra. Nutricionista con tremenda cara de culo, diga.
Debo reconocer que gracias al universo, aquel panzazo desmesurado sólo quedó en sueños y pude resistir la tentación. Sin embargo los genes son más fuertes, mi historia corporal habla de gorduras variadas y por supuesto, mi familia también.
Definitivamente tengo que poder ir en contra de aquella historia que me ha perseguido por años, al menos por ahora lo vengo logrando, ansío que dentro de setenta y pico de días pueda decir lo mismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario